Vapuleando a la razón

            

¿Qué están haciendo con mi gente? ¿ conmigo? ¿con la ciudad?

Ahí vamos todos caminando como zombis, mirando sin mirar,

Ahí vamos todos como cabezas jíbaras sin poder hablar,

ya no hay frío ni calor, lo único que sentimos es dolor,

no podemos confiar en nadie, porque nadie, a esperanza mató,

¿y los amigos? los amigos van quedando en el camino,

gracias a que un conocido los zancadilló.

Libertad, respeto y derechos,

son palabras muy difíciles de encontrar por ahora en cualquier diccionario,

Aunque, tal vez y con suerte,

las veas escondidas detrás de la palabra tabú.

¿La fe? la fe acaba cuando a diario vemos,

que le quitan los clavos a Jesús,

para enterrárselos bajo las uñas y torturarlo,

gritarle mil nombres y verle caer, y verle sangrar lleno de plomo,

y verle llorar, y oirle gritar a Papá, que la tarea es difícil,

que mande por él.

¿Hambre? el hambre ha renunciado a seguir en nosotros,

se ha dado cuenta que con nosotros no tiene futuro,

los lactantes se preguntan, llorando,

              por qué del pezón que maman sólo sale miedo,

       que recorre y corroe sus frágiles cuerpos en formación.

¿La soledad? la soledad es nuestro refugio más seguro tal vez,

¿y la muerte? Quizá -pero sólo quizá -nos haga descansar en paz.