viernes, 14 de enero de 2011

Tú decides



Acuérdate de mí cuando estés lejos,
cuando ya te hayas ido;
acuérdate cuando te hayas convencido
que tu ida no es huída
ni temor, ni miedo a la verdad;
que tus manos no tiemblen al sentir la brisa matinal,
que tus piernas no se doblen
al crujir de las hojas en un ambiente otoñal;
acuérdate de mí
cuando hayas cruzado el puente,
cuando hayas pasado el tormentoso río
y ese bosque espeso y misterioso donde hace frío.
¿Te vas? No te detengo;
no te voy a hacer perder tu tiempo…
sólo acuérdate de mí cuando estés lejos.


        copyright©

No hay comentarios:

Publicar un comentario