¿Dónde estás, madre mía,
dónde estás, corazón;
que cuando te busco
no estás ni en la sala ni en la cocina,
tampoco en algún rincón?
Tu cama sigue vacía y fría,
tus pantuflas bajo la cama
y tu bata colgada ahí.
¿Dónde estás, madre mía,
que no te veo,
que no siento tu aliento
ni veo tus ojos brillar?
¿Dónde estás, madre mía,
que lo único que hay en mi mente
y retumba en mi cerebro
son tus lamentos
que laceran mi corazón?
Son tus quejidos
que me nublan la razón,
es ese viento helado
que recorre mis pies
al verte sufrir así,
es este dolor que oprime mi pecho
el que me hace gritar
¿dónde estás, madre mía,
dónde estás, corazón?
Por favor, que alguien me diga
qué he hecho mal
para verte así sufrir;
quiero saber el pecado que cometí
para que tú sufras así.
Madre… tus quejidos
son espinas en mi corazón,
tu mirada perdida
es una nube negra
que nubla la razón.
Madre, ¿donde estás, madre mía,
dónde estás, corazón?
copyright©
copyright©
este poema lastima mi alma, me llega al corazon, y no me lastima por alguna razon mala si no por lo hermoso que esta y por la profundidad de las palabras.
ResponderEliminar